FRANCO BATTIATO: CENTRO DI GRAVITÀ PERMANENTE
Hola.... ¿hay alguien?... Son las 21.42 y debo ser la única personilla de los alrededores que no está pegada a la tele viendo la final... Pero tengo la radio puesta, no se me confundan, no soy de las que se complacen en marcar su diferencia y arrugan la nariz ante los espectáculos masivos y sobre todo el fútbol.
¿Se acuerdan de los tentetiesos? Esos muñecos un poco odiosos que siempre se mantienen derechos, que tienen una piedra o qué sé yo, que les aplica permanentemente la ley de la gravedad, sin que puedan torcerse o caer nunca. Cuando el maestro siciliano canta a su centro di gravità permanente se refiere a todo aquello que, no sólo nos mantiene vivos, sino derechos, rectos, invencibles. Ya, ya sé que soy monotemática pero conste que esta canción, ese estribillo, siempre me ha parecido demoledor: busco un centro de gravedad permanente que no me haga cambiar las ideas sobre las cosas y la gente.
No tengo fuerzas ahora para contarles todo lo que aconteció en el concierto de Franco Battiato hace un mes, porque es uno de esos momentos especiales que me guardo en una cajita y todavía me da miedo sacar a la luz, por si se rompe por el camino o se pudre. El caso es que llevo semanas reflexionando sobre el centro de gravedad, nuestro centro de gravedad, y no porque haya encontrado el mío. Aunque sé que estoy cerca cuando camino por ciertos lugares y sé que en esos momentos es ahí donde quiero estar y en ningún otro sitio del mundo. Mirar a las personas ayuda a mantenerse en gravedad, reirse, explorar las pupilas de los demás, una caricia en el momento oportuno, una cerveza al sol con los amigos, una siesta en la playa, la foto del hijo de un compañero en el trabajo... Son piedrecitas como las que albergan los tentetiesos y todo ello contribuye a que nos sintamos en gravedad permanente. Como ya he dicho en anteriores ocasiones, firme, serena, invicta, desafiante, sonriente... Y es que el cuento de la fuerza mental va a ser verdad... Yo me entiendo. :)
Feliz inicio de semana y que ganen los mejores. Siempre.
4 comentarios:
Jejejejeje. Ayer también estuve viendo vídeos de Battiato y arrepintiéndome de no haber ido.
Vuelve a España en julio: Zamora, Madrid y Gerona.
¡Con lo cerca que quedaba Burjassot!
¡Qué pintas las del maestro siciliano, pardiez! Y no hace más que 20 años...
Pues tiene su mérito escribir a las 21.42 de ayer, sí... Yo vi el partido doble, y no precisamente por cuestiones alcohólico-festivas, no... como aficionado y currante.
Bueno, eso de que gane el mejor... Siempre... Yo creo que es mejor que esa ley o deseo no se cumplan muy a menudo. Porque ganaría el mismo siempre, y habría pocas posibilidades de ser tú mismo. Vamos, tendrías una posibilidad, entre todas las que se presenten; malo, o no muy bueno, para los centros gravitatorios permanentes de la mayoría.
Así que, espero que las matemáticas nos libren de su yugo, y mantegamos la puerta abierta a la esperanza... Preferiría que ganase el que más se lo mereciera, al margen de si es el mejor o no. Pero eso tampoco se suele cumplir.
"El mejor" es un concepto discutible ¿no? Es una de esas palabras que con el tiempo y los años descubres que no es como te habían dicho, no es algo unívoco sino que tiene múltiples enfoques y "que gane el mejor" para mí siempre es el que se lo merece, por méritos propios, ajenos o simplemente porque sí, porque me da la gana. ¿Aclara esto algo, querido amigo marxista? ;)
Yo estuve allí y fue estupendo. Para mí es uno de los imprescindibles.
Y por suerte vuelvo a verlo en unos días.
Un abrazo siciliano,
M
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