LOS ENEMIGOS: ESTÁS (CUANDO TE VAS)
Hay quien está sin estar. De hecho, hay quien sólo está cuando se va, porque sentimos su presencia una vez se ha materializado su ausencia. Hay quien está y en realidad nunca está, porque notamos su mirada lejana y su mente a kilómetros de nosotros. Cuando vamos a cogerle la mano, ésta se desliza o parece la de otra persona, incluso parece nuestra propia mano cuando está dormida y la creemos ajena. Buscamos una mano y nuestro puño se cierra sin conseguir atrapar más que aire.
Muchos me han preguntado ya "Ms. Dumont, ¿por qué todavía no ha hablado de Los Enemigos? ¿Por qué, si son el mejor grupo de rock español de los 90 y de los mejores de la historia? ¿Por qué, si algunas canciones suyas son capaces de atraparle las entrañas hasta dejarla sin aliento?" Bueno, el tiempo es largo y la red es infinita, contesto siempre, ya vendrán canciones de Los Enemigos. Aquí va la primera. Y no crean que no he tardado en encontrarla en la web pero por fin, ayer sucedió y la emoción casi me impidió respirar. Todavía me estremezco cuando veo a Josele, años atrás, y se desencadena en mi mente una tormenta de recuerdos.
En 1996 Los Enemigos firman uno de sus mejores discos, Gas, y en él incluyen la que para mí está entre sus cinco mejores canciones, por no decir que es la mejor. En Tengo una casa, la peli de Mónica Laguna en la que Josele y los suyos ponían la banda sonora, Nancho Novo está solo en su casa, confuso por el amor de una mujer que se le resiste, y pone en su tocadiscos esta canción. Silencio, que nadie hable, canta Josele.
A menudo recurro a este tema. Da igual lo que me pase por la cabeza, si me siento un poco perdida escucho este baladón y me reconforta, porque habla de ausencias, de recuerdos, de insomnio y de palabras que ya no significan nada. Es más, Los Enemigos recuperan esta canción en sus Obras escondidas, segundo testamento musical en directo tras su separación, y casi me quedo con esa versión, en la que la voz de Josele está más rota pero más sentida que en el estudio.
Nunca sabré muy bien de qué habla esta canción. No llego a saber si él se siente ausente en una relación que toca a su fin, o si es ella la que no está aunque esté. Me quedo con el lamento dolorosísimo: ¿qué hay que decidir? estar solo o estar sin ti. Porque a veces estar con alguien no es lo mismo que estar acompañado y uno puede estar en la más absoluta soledad aunque alguien a su lado intente hacerle una caricia. O quizás uno está solo porque la persona que tiene al lado no le dirige apenas una mirada, quizás es esa persona la que cuando está, se va. En el fondo, creo que la confusión de esta letra está estudiada a fondo (¿es que Josele alguna vez ha dejado algo al azar?) y no es más que la confusión reinante en la vida y en las relaciones. No se sabe quién es quién, quién daña a quién y quién debería dar un paso hacia no se sabe dónde.
LOS ENEMIGOS: ESTÁS (CUANDO TE VAS)
Gas - 1996
No lo pienses tanto,
ni sé dónde ni sé cuándo.
Ya me aguanto,
sin despertar me levanto
¿Por qué no puedo dormir?
¿Por qué no sé qué decir?
Y... ¿qué hay que decidir?
Estar solo o estar sin ti.
Mira que lo intento
¿Sabes?, lo llevo muy dentro.
Ni veo el momento,
ni sé si es que me lo invento
¿Por qué no puedo dormir?
¿Por qué no sé qué decir?
Y... ¿qué hay que decidir?
Estar solo o estar sin ti.
Estás cuando te vas,
y te vas cuando estás,
estás cuando te vas,
cuando no estás si estás te vas.
Estás cuando te vas,
y te vas cuando estás,
cuando te vas,
y si estás te vas.
No lo pienses tanto
ni sé dónde ni sé cuándo.
Ya me aguanto,
sin despertar me levanto.
¿Por qué no puedo dormir?
¿Por qué no sé qué decir?
Y... ¿qué hay que decidir?
Estar solo o estar sin ti.
¿Por qué hay que decidir?
Estar solo o estar sin ti.
Estar solo o estar sin ti.
Estás cuando te vas,
y te vas cuando estás,
estás cuando te vas,
cuando no estás si estás te vas.
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