lunes, 23 de abril de 2007

Canciones de lunes (1)

Bruce Springsteen: Thunder Road.
Esta noche seremos libres.




A veces huimos de aquello que más amamos. O bien, sólo encontramos la paz cuando retornamos a aquello de lo que huimos. La mayor parte de las canciones de Bruce Springsteen hablan de hombres que circulan por carreteras que no llevan a ningún sitio y que sin embargo les muestran el camino a seguir. Y esos hombres luchan por abandonar el lugar que tanto odian pero a la vez desean volver a él.

Siempre me gustó Springsteen, pero esta canción es la que me “enganchó” al jefe. Eso sí, mi favorita siempre será la versión del Unplugged en la MTV, un disco de supuesta edición limitada que le supliqué a mi madre que me comprara, en el verano del 93 o así, tendría yo unos 15 años. Necesitaba tenerlo, pensaba que en pocos días dejaría de estar a la venta porque los fans lo agotarían y ella me lo compró en cassette. Eran otros tiempos. Años después lo he seguido viendo a la venta, en cd, en vhs y hasta en dvd. En fin…

Thunder Road es la primera (y casi la única) letra en inglés que he logrado memorizar en toda mi vida. Y me encanta, de vez en cuando viene a mi cabeza el solo de armónica con el que Bruce abre el tema en el umplugged y sólo eso ya me pone los pelos de punta. Luego me enganché a canciones como The river, Lucky Town, Better Days, Born to run, y cada una de ellas contiene una pequeña historia personal. Pero ésta es la canción que más me gusta del boss, empezando por el homenaje a Roy Orbison y siguiendo con el ambiente sórdido que refleja, la promesa de amor, la salvación de huir hacia delante…

Cuando la escucho pienso qué pasará con el protagonista, si finalmente Mary le acompañará o irá solo en su viaje (iniciático). También me pregunto sin conseguirá salir del batallón de los perdedores sólo con dejar atrás el lugar a lomos de su coche, que imagino el típico “trasto” destartalado de las películas americanas. Parecido a la furgoneta de Clint Eastwood en Los puentes de Madison.

En realidad, supongo que todos, de alguna manera, nos disponemos a ganar la batalla de los perdedores cada día, cuando arrancamos el coche para ir a trabajar. Y sin duda el mejor día para reflexionar sobre el significado de nuestro viaje es el lunes.


1975. Thunder Road - Carretera del Trueno

La puerta con rejilla se cierra de golpe,
el vestido de Mary ondula.
Como una visión, baila en el porche
mientras suena la radio.

Roy Orbison está cantando para los solitarios.
Hey, ése soy yo y te quiero sólo a ti.
No me hagas volver a casa,
no tengo valor para estar solo.

No corras adentro,
cariño, ya sabes para qué estoy aquí.
Así que estás asustada y piensas
que quizá ya no seamos tan jóvenes.

Muestra un poco de fe, hay magia en la noche.
No eres una belleza, pero, oye, no estás nada mal.
Oh y para mí está bien.

Puedes esconderte debajo de las mantas y estudiar tu dolor,
hacer cruces de tus amantes, tirar rosas bajo la lluvia,
pasar el verano rezando en vano
para que un salvador aparezca en las calles.

Bueno, yo sé que no soy un héroe, eso está claro.
La única redención que puedo ofrecerte
está debajo de este sucio capó,
con una posibilidad de que salga bien.

Oye, ¿qué más podemos hacer?
Excepto bajar el cristal,
y dejar que el viento lleve hacia atrás tu pelo.

Bien, la noche irrumpe con fuerza.
Estos dos carriles nos llevarán a alguna parte.
Tenemos una última oportunidad de hacerlo realidad,
cambiar esas alas por unas ruedas.

Sube atrás.
El cielo nos espera en el camino.

Oh oh, venga, coge mi mano.
Esta noche la tierra prometida será nuestra.
Oh Carretera del Trueno.

Estirada ahí fuera como un asesino al sol.
Oye, sé que es tarde, pero podemos llegar si corremos.
Oh Carretera del Trueno.
Agárrate fuerte, Carretera del Trueno.

Bien, tengo esta guitarra y aprendí a hacerla hablar.
Mi coche está ahí atrás,
si estás preparada para hacer ese largo camino
desde tu portal hasta mi asiento delantero.

La puerta está abierta, pero el viaje no es gratis
y sé que anhelas oír las palabras que no he dicho.
Pero esta noche seremos libres,
se romperán todas las promesas.

Había fantasmas en los ojos
de todos los muchachos que rechazaste.
Rondan esta polvorienta carretera de la playa
en los esqueletos de Chevrolets quemados.
Por la noche gritan tu nombre en la calle,
tu túnica de graduación yace en harapos a sus pies
y en el frescor solitario antes del amanecer
oyes rugir sus motores
pero cuando llegas al portal ya se han ido con el viento.

Así, pues, sube, Mary.
Ésta es una ciudad llena de perdedores
y yo me voy de aquí para vencer.



3 comentarios:

Anónimo dijo...

Esta canción siempre me hacía llorar, y la escuché por primera vez con 15 años gracias a uno de mis mejores amigos, Prit, en el colegio. estoy contigo, es la mejor canción de B. aunque tb me encanta Tunnel of Love, y es que nena, todas tenemos un pasado ;)
tu texto me ha puesto los pelos de punta
un beso mu mu grande chata!

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Margaret Dumont dijo...

Pues sí, nuestro pasado nos precede, en todos los sentidos... Pero ya sabes, better days are shining trough!!
Besos. ;)